Pensamos que es así por el bombardeo de información que nos llega diariamente por medio de las redes sociales y por personas que piensan que la imagen es pura estética.

Hasta me apuraría a decir que la imagen gira en torno a la ropa solamente. Al como tienes que vestirte o ir maquillada y nos olvidamos de la verdadera esencia de la imagen.

Sutilmente nos han querido vender que las personas que se preocupan por su imagen, son superficiales y con falta de preparación.

También hay otra parte que no debemos olvidar, y que tiene mucho peso, el consumo. Con el boom de las redes sociales y los influencers, las firmas han podido crear una necesidad de consumir todo aquello que vemos, sin pararnos a valorar lo que necesitamos.

Viendo la parte positiva de todo esto, somos más conocedores de cómo está evolucionando la moda y con ello nos vamos formando e informando de todo lo nuevo que hay en el mercado de una manera más rápida y directa.

Pero, esto no quiere decir que nos debemos dejar engañar. La imagen no es solo eso. La imagen de una persona tiene la parte estética, que sería todo esto que acabamos de hablar ahora, pero, también está el saber estar, la comunicación no verbal, la comunicación verbal y el conocimiento de los códigos que transmitimos en todo momento.

Vivimos en un mundo muy competitivo por eso cada día nos obliga a que estemos mejor preparados, de ahí la gran oferta y demanda que existe en formaciones de toda índole. Todos buscamos ser los mejores en nuestro campo.

Pero no nos damos cuenta que no estamos solos, todos queremos ser los mejores en un campo en el que muchos quieren ser los mejores. Apostamos todos juntos a la misma ficha ganadora, la formación y conocimientos, que son muy valiosos, pero, con esto ¿te diferencias de los demás?

Yo te invito a que reflexiones un poco. Piensa en el tiempo que le has dedicado a meter todos esos conocimientos en una caja, la misma caja que tenemos todos. Pero, a la hora de presentar esa caja a los demás no nos preocupamos ni ocupamos en que ésta se diferencie del resto.

Con esto quiero decir que lo que nos diferenciará del resto somos nosotros mismos. Tu presencia te llevará un paso por delante del resto, porque es la suma de tu caja más tu esencia lo que te hará único.

Haz que tu envoltorio hable en todo momento de ti. No niegues tu imagen porque te podrá ayudar a alcanzar el éxito.